Una investigación presentada en la reunión anual de la American Society for Nutrition ha revelado que incrementar en un 20% la adopción de la Dieta Mediterránea por parte de la población adulta de EEUU podría ahorrar entre 30.000 y 45.000 millones de dólares al año de gasto sanitario. Mejorar el patrón alimentario de los norteamericanos supondría reducir costes asociados con cardiopatías, diabetes, cáncer y otras enfermedades.
Se trata del primer estudio dedicado a analizar exhaustivamente las implicaciones del coste potencial de adoptar un patrón alimentario saludable (medido por el Índice de Alimentación Saludable -HEI, por sus siglas en inglés- y el marcador de la Dieta Mediterránea -MED-) entre adultos estadounidenses en relación a los principales tipos de enfermedades crónicas. Las investigaciones previas se habían centrado en poblaciones específicas o en enfermedades concretas, como las cardíacas.
“Descubrimos que aumentar la adopción de patrones dietéticos saludables en un 20% de población tendría el potencial de ahorrar más de 20.000 millones de dólares en gastos directos e indirectos asociados con diez problemas de salud importantes", afirma la autora principal del estudio Carolyn Scrafford, investigadora jefe de Exponent, una empresa de consultoría científica. “Se trata de un ahorro significativo de lo que consideramos un cambio realista en la calidad de la dieta”, añade.
Scrafford presentó la investigación en la reunión anual de la American Society for Nutrition, Nutrition 2018, celebrada del 9 al 12 del pasado mes de junio en Boston. El proyecto de investigación fue financiado por el National Dairy Council.
El equipo de Scrafford estimó el ahorro de costos en dos escenarios. El supuesto más conservador consideró los ahorros que podrían lograrse si los adultos estadounidenses aumentaran en un 20% su adhesión a un patrón dietético saludable. El otro escenario, más ambicioso, proyecta el ahorro resultante si el aumento de la mejora alimentaria -medida en HEI y en MED- alcanzase el 80%.
Tanto el índice HEI como el MED son marcadores de lo que se consideran patrones dietéticos saludables. El Índice de Alimentación Saludable se usa con frecuencia en EEUU para evaluar la dieta norteamericana y refleja el cumplimiento de las Pautas Dietéticas para Americanos 2015-2020, mientras que el MED se utiliza para describir la dieta de los países de la región mediterránea y enfatiza componentes como el pescado, nueces y frutas, junto con el aceite de oliva como una fuente de grasa saludable.
El adulto promedio estadounidense actualmente muestra aproximadamente un 60% de adhesión al HEI. Si este parámetro incrementara al 72% (un aumento relativo del 20%), el análisis muestra que EEUU podría ahorrar anualmente entre 30.000-47.000 millones de dólares en costos relacionados con la salud. Bajo el escenario más ambicioso, si el adulto promedio estadounidense aumentase su adhesión al 80% del HEI, los investigadores proyectan un ahorro anual de entre 52.000-82.000 millones al año.
Fuente Mercacei
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